- Para empezar, 50 millones de personas murieron, o mejor dicho, fueron asesinadas bajo el mandato de Hitler, y las garras de la Segunda Guerra Mundial. A esta cifra hay que sumar los prisioneros, las secuelas de los campos de concentración, la desorganización familiar, el hambre y el esfuerzo de adaptación de los soldados vueltos a la vida civil.
- También desaparecieron ciudades, vías férreas, carreteras, puentes y plantas industriales que al final afectó a los campos más fértiles.
- Además, Alemania, debió aceptar la rendición incondicional y los aliados dividieron su territorio en cuatro zonas de ocupación: Norteamerica, Inglaterra, Francia y la Unión Soviética. Berlín también fue dividida en cuatro.
- Europa perdió el poder global que conservaba de la guerra. Nació una "bipolaridad" del poder entre Estados unidos y la Unión Soviética. Algunas monarquías cedieron paso a regímenes republicanos. Algunos ejemplos son: Italia, Yugoslavia, Albania, Rumania y Bulgaria. El mundo comunista se expandió en Europa Oriental y los Balcanes, y por lo tanto, se planteó un nuevo conflicto entre un lado comunista y otro lado democrático.
Para concluir diré que una guerra puede verse desde dos puntos: uno negativo y otro más bien positivo o progresista. Todo el mundo tiene claro por qué una guerra es mala, agresiva, asesina. Pero menos personas piensan que los humanos aprendemos de los errores, y que la necesidad (de ganar una una guerra) hace que la mente humana de lo mejor de sí. Por ejemplo, sin guerra, hoy día no gozaríamos de las tecnologías que nos hacen la vida un poquito más fácil.
Webgrafía: www.engage-edu.org y www.ushmm.org
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